Existe, en mi país, en mi cuidad, (y supongo que en muchos países y ciudades más), un tipo de personaje que aterroriza la ciudad.
Ese personaje suele encontrarse en el transporte público a las horas más pobladas, esa horas mágicas donde se juntan las cosas que uno nunca pensó que podrían juntarse dentro de un espacio de 5x2.
Viejas chetas, jóvenes rockeros, emos, floggers, planchas, sucios, niños con sus madres, entre otros se juntan en este espacio en el que se pierde toda la privacidad mínima y tu cuerpo se comprime a un punto físicamente imposible.
En ese momento puede que tengas suerte y el señor te ilumine con un asiento, justito adelante tuyo, para poder sentarte.
Como regla general, que nunca ha sido pronunciada, a la persona que estaba sentada junto al que se baja (o sea, el que se queda), le corresponde el asiento del lado de la ventana; y el/la afortunada beneficiaria del nuevo asiento le toca el del pasillo.
Bárbaro, te sentás re feliz, porque no tenés que aguantar más pisotones ni respiraciones en la nuca y podés escribir un sms sin que se entere toda la república de lo que dice.
Pero justo en ese momento aparece el personaje. El tipo que va paradito en el pasillo al lado de tu asiento, al que mágicamente, por un tema de promedios su bragueta le queda JUSTO a la altura de tu hombro, y aprovecha, asquerosamente, cada frenada, movida, pisada, persona que baja, para refregártelo con ganas.
Que asco! realmente los repudio tanto, me hacen acordar a esos perros que agarran todo objeto que encuentran para refregarse frenéticamente.
En esos momentos me encantaría vestirme como una punkie, y tener clavos y pinchos en mi campera para agujerearles un huevo a ver si siguen jodiendo.
Alzados, asquerosos, inmundos!
Pd: Volví, sé que nadie me extrañó, pero bueno, yo si extrañé poder escribir. Se me rompió la computadora, y tuve que estudiar mucho. Espero no me pase muy seguido.
Yo sí extrañé! Ya me aburría la cara de la Fulop cada vez que entraba a ver si había algo nuevo jajaja.
ResponderEliminarEstá buena la idea punky. Una vez mi hermana andaba medio con ataques de pánico, y cuando un tipo se le apoyó en el hombro casi se desmaya.
Besos!